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Algo que sin duda os habrá ocurrido a más de uno: Vais paseando tranquilamente y os dais cuenta que los pajaritos (gorriones, jilgueros o cualquiera) están particularmente “confianzudos” ese día. Te dejan acercarse tanto que casi dirías que se dejarían tocar. Inténtalo. En cuanto intentas agacharte TODOS salen volando.
No sé a vosotros, pero me llama la atención ese comportamiento. He repetido el experimento muchas veces, las suficientes. Tienen confianza (hasta cierta distancia).... pero justo hasta el momento que te agachas. Joer.
Explicaciones posibles:
1- Selección natural: el pajarito que en los últimos 80.000 años se ha quedado quieto cuando un ser humano se ha agachado, no ha vivido lo suficiente como para transmitir ese rasgo a sus descendientes.
2- Selección cultural: Los pajaritos aprenden mayormente de ver hacer a sus papás. Que son precisamente los que han salido zumbando a tiempo.
3- Aprendizaje individual: A todos los pájaros les han tirado alguna vez una piedra. Menos mal que nunca damos en el blanco.
4- Aprendizaje grupal: El pajarito que se ha librado de una pedrada por el canto de una pluma va a salir zumbando y piando “Cuidado-pip!” la próxima vez que vea un bípedo que se agacha. Los demás pajaritos sólo le siguen la corriente.
5- Son muy listos: saben perfectamente que te agachas para coger una piedra y tirársela. Y si no, por si acaso. Mira qué le pasó al vecino del nido de abajo.
Vale... ¿pero si llevo ya la piedra en la mano, qué?
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14 comentarios:
Hola jefe:
Interesante, sin duda. Hasta ahora pensaba que se trataba de una simple cuestión de "zona de seguridad" del animal para garantizarse la huida, lenguaje corporal (léase adrenalina en sangre) y demás... porque está claro que existe una "presión selectiva" a favor del pájaro que sea "muy cuco" leyendo el lenguaje corporal del sapiens urbano.
Ps. deja en paz a los bichos joé
Pues ...no sé.
Los pájaros no son lo mío, sí me han padecido generaciones de perros. Estos nos leen el menor signo corporal que hagamos como si fuera un cartel con letras de neón: he llegado a tener perros que con un gesto casi imperceptible - incluso para mí - saben a qué atenerse.
Con los años llegué a pensar que estaban muy humanizados, luego me di cuenta que era yo la que me estaba "perrunizando".
En cuanto a pájaros varios, npi, salvo que aquí también se comportan así.
En cuanto a llevar una piedra en la mano...la piedra NO saldrá volando sin un previo movimiento de tu brazo.
Si las cucarachas son capaces de detectar de dónde viene el zapatazo y salir exactamente para el lado menos pensado y perderse en la olla de la cocina, pues porqué no unos pájaros. Tanto unos como otros vienen viviendo con (de) nosotros de hace milenios.
Así que vuelve a la plaza, o parque, y repite el experimento llevando la piedra, y observa y nos cuentas.
Yo no me arriesgo, a ver si le erro al pájaro (eso seguro) y le pego a alguien y me tienes que enviar chocolates a la cárcel.
Hola urbanitas!. Afortunadamente vivo en un pueblo creca del monte y puedo hacer el experimento en condiciones mas incontroladas que en un parque público. Pero no, porque, si le doy , me da algo. Aún recuerdo mis primeros experimentos venatorios con una carabina de aire comprimido.
Pero es verdad, los bichos "nos leen" las intenciones de lejos. Lo que me parece curioso es que ocurra también con animales salvajes.
Hola jefe:
Quizás debas recurrir al camuflaje y a situarte en sentido contrario al viento... los carnívoros lo hacen y quizá (quién sabe) los animales salvajes lo esperan así.
No imagino qué impresión debe causarle a un bicho migratorio de esos un barbudo y ruidoso experimentador que se acerca oliendo a sudor y adrenalina (¿?) y migas de pan...
De nuevo tenemos la incertidumbre de Heisemberg donde el experimentador afecta a lo observado en una magnitud no despreciable.
juas
Ps. ¿Tenías una casita de campo...? uiis qué interesante oiga.
Asirio: Todo eso de acercarse contra el viento disfrazao de camuflaje como si fueras un marine en Vietman son paparruchas. Como todo el mundo sabe, la forma mas segura de cazar es acercarse discretamente, como quien no quiere la cosa, a la carnicería de la esquina. Entonces, cuando mas confiada está tu presa, sacas el billetero y...¡zas! te la llevas en una bolsa. No falla.
El principio de incertidumbre se aplica en este caso porque nunca podrás estar seguro de si llevas suficiente munición en el billetero.
Y no tengo una casita de campo. Sudor sí, que hace calor.
Ni mucho ni poco, ni todo ni na.
Depende, todo depende.
Si te quieres hacer de un buen plumero no debes de correr tras los ñandúes (avestruces de este tercer mundo) nada más te sientas mirando para otro lado y ellos vienen solos, de curiosos que son. Aviso: patean para adelante y pueden desjarretar un buey...
Volviendo a que si nos leen las intenciones, depende también.
En algunos casos los bichos no nos han visto en la puty life (debe haber igual cantidad de bichos así como de señoritas vírgenes en mi parroquia) y se acercan , o siguen su vida, sin darnos importancia.
Otros, por si las moscas, salen corriendo o volando o escarbando, que mejor ignorante pero vivo que informado pero finado.
Hasta yo hago rimas últimamente...
Por cierto, qué bochorno, en estos momentos nos damos cuenta que tanto hablamos de Cumbres de la Tierra, Protolocos de Kyoto, Ecología Ambiental, y no sabemos qué hacer ante un puñado de pájaros...
Wenas:
Existe un articulillo , no lo tengo pero lo conozco a traves de una buena fuente, en el que se estudia la distancia de escape de los gorriones en relación con la densidad de población siendo esta menor en los nucleos urbanos mas densos.
saludos;
Psychobicho
Wenas:
¡hola Psychobicho! :)
me queda una duda.
Donde dices "...en el que se estudia la distancia de escape de los gorriones en relación con la densidad de población siendo esta menor en los nucleos urbanos mas densos."
"siendo esta menor" ¿la densidad de población de gorriones o la distancia de escape? . De ser menor la densidad de población, ¡sigo sin entender, perdona! :((
saludos;
Psychobicho
Hola Nfer:
Interpreto, aunque pueda equivocarme como cualquier hijo de vecino, que es la distancia de escape la que varía, y en las ciudades (mayor densidad de población) la distancia sería menor.
Debo suponer también que:
En las ciudades los pajarracos asumen "mayores riesgos" (menores distancias) porque hay menos peligro o sus alimentadores son humanos.
Ps. Todo esto para que luego sea al revés.
Saludos asirios.
Jau. Vaya babayada la de los pájaros!. Encuentro lógico que la "distancia de escape" varíe con lo acostumbrados que estén los pájaros a la gente. Algunos gorriones tienen una distancia de escape tan pequeña que roban las migas de la mesa mientras comes.¿Y qué?. Lo curioso es que si te agachas igualmente huyen. Probadlo. No hace falta ser muy brusco. ¿Como han aprendido a relacionar el acto de agacharse con una situación de peligro?. ¿Es genético o adquirido ese comportamiento?. Ya no puedo dormir de noche meditando sobre la cuestión, asi que duermo de día mientras conduzco. :p.
Jopó.
Es cuestión de movimiento. Si te estás relativamente quieto, eres inofensivo. También pasa lo mismo con la trayectoria que sigas. Si vas a pasar a un metro, pongamos, pero claramente no vas en su dirección, entonces no se mueven, pero como des un paso de lado, aunque estés a 2 metros, salen volando.
Una cosa curiosa que yo había observado con los gorriones es que sabían para qué sirven las vallas. Vamos, que les veía pasar al otro lado de la alambrada para ponerse a salvo.
Pues mira, otro efecto mas extraño. En los alrededores de las canteras es frecuente observar multitud de animales. Como nadie les da caza normalmente no se asustan de nada: tengo que tocar el claxon para que se aparten los conejos, las ardillas saltan sobre el capó del coche y las perdices se pasean entre las ruedas de los camiones como si nada. Eso por no hablar de zorros que se montan ataques comando al comedor para robar la comida de las bolsas y de los cubos de basura mientras la gente trabaja. O de pájaros que anidan en el chasis de los camiones... en marcha.
Salvo los jueves en la temporada de media veda. Ese día no verás ni siquiera una paloma. Como no me creo que sepan leer el calendario o el BOE deduzco que reconocen los disparos de escopeta. O tal vez sean los perros, no sé. Pero lo saben. Puede que no sean tan tontos como pensamos.
El mago de Oz se ha llevado el último espantapájaros.
Los pájaros ven desde el aire dos trozos de terreno, uno con espantapájaros y el otro no, y descienden..donde está el espantapájaros: han aprendido a que, donde hay tales espantos, en realidad hay comida. (experimento conducido con rigor científico luego de partirse de risa los colonos ante la sugerencia de poner espantapájaros en las huertas).
Otra: las cotorras, ávidas devoradoras de semillas de girasol, las que además desperdician con lujuria.
El método para eliminarlas y que tuvo algo de éxito fue embardunar las bocas de los nidos con grasa y un plaguicida específico. Al ser la cotorra un ave limpia, y querer quitarse el pringue de las plumas, ingería el veneno.
¿conclusión? los nidos y las cotorras siguen,ya no en los montecitos bajos que rodean los campos cultivados: se fueron a las copas más altas de los eucaliptus... y no es que hayan estado antes allí y al desaparecer las de los montes bajos, quedó más alimentos.
No señor. Se fueron a anidar lejos del cepillo que les untaba las bocas de los nidos, pero siempre cerca del alimento...
Misterio.
(Por cierto, serás vos, Xac el que piense que los bichos son tontos ;).
En mi caso, los que conviven en casa, me reconocen al llegar y salen o se esconden según los tenga clasificados, y si les pillo in fraganti, tienen un plan "a", un plan "b" y tal vez un plan "c" para eludir mis ataques.
En fin, los que están, porque son más vivos que el hambre....los otros ya no están, si es que lo estuvieron alguna vez.
Hola Jefe:
Se me había olvidado sugerir algún "experimento". Aseguras que al agacharte, el pájaro vuela. Bien, supongamos otros movimientos, por ejemplo levantar una mano (rápido o despacio), mover el brazo lateralmente...
(Procura que no te vea ningún vecino o cualquier alegre cantero).
Se me ocurre que quizás el acto de agacharse recuerde el movimiento que hacen los felinos antes de saltar (una chuminada como la copa de un pino y difícil o imposible de verificar porque nadie le va a hacer una tomografía de positrones a un gorrión en ambos casos).
Para lo de la veda, npi.
Saludos
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