19.10.06

Ya se que he prometido que no hablaría de la evolución en este blog, que eso es cosa de Maxi... pero qué le vamos a hacer!. La cabra tira al monte. Hoy os cuelgo este artículo publicado en La Vanguardia de hoy. ¿Os acordais de Poltergeist?. ..Ya estan aquíí...

LA TEORÍA DE LA EVOLUCIÓN A DEBATE
El antidarwinismo se asoma a Europa
Primeras iniciativas para la enseñanza del diseño inteligente en la escuela
BEATRIZ NAVARRO - Servicio especial BRUSELAS - 19/10/2006

Tímidamente, los creacionistas que rechazan a Darwin empiezan a levantar la voz en Europa. La Eurocámara ha acogido un debate, Polonia quiere retirar la teoría evolutiva de la escuela y una universidad parisina se apunta a la tendencia

"La teoría de la evolución es una mentira", sostiene Maciej Giertych, ultraconservador polaco
El debate sobre la enseñanza en la escuela del llamado creacionismo o diseño inteligente, que rechaza a Darwin y su teoría de la evolución, ha llegado, aunque sea tímidamente, a Europa. En Estados Unidos, los llamados creacionistas - cristianos evangélicos que opinan que la complejidad de formas de vida como la humana no puede deberse a la mera evolución de un microorganismo, sino a alguna inteligencia superior- han vuelto a la carga para denunciar la falta de peso científico de la teoría de la evolución y eliminarlas del sistema educativo o equilibrarlas con otras teorías. Y la primera discusión en un foro europeo sobre este tema se produjo la semana pasada en el Parlamento Europeo, en un debate organizado por el diputado polaco Maciej Giertych, que pidió acabar con el monopolio de las teorías darwinistas de las aulas europeas. "Es una teoría que debe rechazarse porque no refleja la realidad", reclamó. Giertych, que en julio protagonizó una encendida defensa del franquismo ante la Eurocámara, no es en absoluto una figura marginal en Polonia. Pertenece a la ultraconservadora Liga de las Familias y fue candidato presidencial en el 2005. En su país, el debate ha llegado a las esferas gubernamentales a través del Ministerio de Educación, que dirige su propio hijo, Roman Giertych. Su viceministro, Miroslaw Orzechowski, reabrió este fin de semana el debate sobre la enseñanza de la teoría de la evolución, muy cuestionada en los antiguos países comunistas. "La teoría de la evolución es una mentira, un error legalizado como si fuera una verdad cotidiana. No deberíamos enseñar mentiras", dijo.

Orzechowski anunció que el Ministerio de Educación polaco va a empezar a debatir la conveniencia de que en las clases de biología se siga explicando esta teoría, que considera una idea débil fruto de la mente de un anciano ateo y vegetariano. Desde su nombramiento como ministro, Giertych, también miembro de la Liga de las Familias, ha sido muy cuestionado por los estudiantes polacos, que se han manifestado pidiendo su dimisión. Giertych padre es profesor de biología especializado en genética poblacional y miembro honorario de la Daylight Origins Society, asociación creacionista con sede en el Reino Unido que tiene como fin informar a los católicos de las pruebas que apoyan la creación especial, en oposición a la teoría de la evolución. y de que "los verdaderos descubrimientos de la ciencia son conformes con la doctrina católica". Según Giertych, las investigaciones que apuntan en esa dirección están de alguna manera censuradas en Europa. "Hay muchos trabajos de centros académicos de todo el mundo que están siendo ignorados en los libros de texto, que no se autorizan en la escuela por razones políticas e ideológicas", dijo en una entrevista a este diario. La semana pasada, Giertych invitó a dos científicos europeos y uno americano a presentar varios estudios críticos con la teoría de la evolución, preocupado por que "los niños europeos estén siendo adoctrinados en las escuelas" con esas ideas.

El debate, celebrado en el Parlamento Europeo, giró en torno a los habituales caballos de batalla de los creacionistas. En primer lugar, demostrar que los estratos terrestres y los accidentes geográficos no se han formado en diferentes eras geológicas, sino que son el resultado de hechos concretos, como una inundación o un meteorito, y de la ordenación natural de la materia en función de su densidad como consecuencia del movimiento. En definitiva, que los estratos geológicos más bajos no son los más viejos, según explicó el geólogo francés Guy Berthault. En cuanto a los fósiles, su edad tampoco puede fijarse por su profundidad, dijo, ya que también se organizan en capas con el resto de la materia. A continuación, el científico alemán Hans Zillmer explicó que el neanderthal no es un antepasado del ser humano, sino una variante más; esta corriente científica es utilizada por los creacionistas para probar la falsedad de la teoría de la evolución. Para demostrarlo, Zillmer recurrió a fotos de personas actuales, como un boxeador norteamericano, con un prominente hueso frontal. Otra idea básica de los creacionistas es que el ser humano es demasiado complejo para ser el fruto de la selección natural. Giertych argumentó que "la formación de la raza es un paso en la dirección opuesta de la evolución". "Es una parte del material seleccionado y es genéticamente mas pobre que la población a la que pertenece, porque se pierde información", afirma.

Cerró las presentaciones Joseph Mastropaolo, profesor emérito de la Universidad de Long Beach (California), detractor de Darwin y científico de cabecera de los neocreacionistas. Mastropaolo ha desafiado con un premio de 10.000 dólares al científico que demuestre que la evolución es ciencia y la creación, una religión. Mastropaolo presentó su teoría antievolutiva sobre cómo la humanidad, en lugar de evolucionar, degenera hasta la extinción, lo que ocurrirá en torno al 2080. "Los humanos hemos sido humanos desde el inicio de los tiempos. Cada especie es un invento de enorme originalidad, completamente diferente del resto", dijo. La pregunta de qué papel tiene el creacionismo en todo este debate no fue del agrado de Giertych. "Disculpe, usted está hablando de ideologías. Nosotros hablamos de ciencia, de la manera en que a los niños se les informa de procesos biológicos, no de ideologías", contestó a este diario. En el debate, ni el diputado polaco ni los científicos invitados reivindicaron el neocreacionismo o la enseñanza de su teoría del diseño inteligente (de la mano de un ser superior). El objetivo del coloquio era otro: "Demostrar que el darwinismo es una teoría, nada más. No es una conclusión que pueda derivarse de la observación de la naturaleza. Nosotros luchamos contra la manera inadecuada de enseñar la ciencia, para adecuar las enseñanzas a la realidad científica que sí está demostrada". Giertych trató de ceñir la discusión "al terreno científico y no filosófico". Un intento vano por momentos, como cuando un parlamentario rebatió una de las afirmaciones más polémicas de Mastropaolo. Entre las consecuencias más dramáticas de la enseñanza de la evolución, el profesor norteamericano citó "189 millones de muertes por parte de los evolucionistas nazis, soviéticos y comunistas durante la Segunda Guerra Mundial". El diputado polaco, que lamenta que las críticas a sus ideas vengan sobre todo de filósofos y no de científicos, intentó no caer en el debate visceral que acompaña a la cuestión y que suele acabar con descalificativos entre ambos bandos.

Como muestra de ese total desencuentro, el turno de preguntas se abrió con las protestas del diputado británico Roger Helmer. "La verdad es que no sé ni por dónde empezar. Nunca antes, en siete años en el Parlamento Europeo, he oído tantas tonterías juntas". La polémica ha alcanzado a algunas instituciones académicas. En junio, el Interacademy Panel, en el que están representadas las academias de ciencias de 67 países, advirtió a padres y educadores de que "las pruebas científicas, los datos y teorías verificables sobre el origen y la evolución de la vida en la tierra" en algunos centros de enseñanza "son enmascarados, negados o confundidos con teorías no verificables por la ciencia", en referencia a la penetración del neocreacionismo en Europa. En Francia, según recogía Le Monde, las sospechas se centran en la Universidad Interdisciplinar de París (UIP, un centro privado que organiza cursos complementarios). Recibe financiación de la Fundación John Templeton, institución norteamericana especializada en estudios que combinan ciencia y religión. Éste es el terreno predilecto del fundador de la UIP, Jean Staune, que califica de "oscurantistas" a quienes se oponen a la posibilidad de un ser creador superior.

En Inglaterra, el debate no es nuevo y ha llevado a la Royal Society a pedir a los sindicados de profesores y al mismísimo arzobispo de Canterbury que se posicionen públicamente contra la enseñanza del neocreacionismo en las escuelas.