Bueno, por fin he podido ver la famosísima AVATAR. Ya me resonaban los oidos de tanto oir (y leer) sobre ella….
Simplemente espectacular. Lo de la visión 3D, toda una “pasada”… aunque he descubierto que el sistema de las gafitas no ha sido diseñado pensando en los que usamos gafas progresivas. Si tienes la mala suerte de ser uno de esos desgraciados, con gafas o sin gafas saldrás de la película convertido en un consumidor complusivo de analgésicos. Pero, eso sí, la película es tan entretenida que soportas el lagrimeo con naturalidad y sólo te das cuenta del tremendo dolor de cabeza que vas a padecer el resto de la tarde cuando faltan diez minutos para que la peli acabe.
Por otro lado AVATAR como película es lo que en el género se llama una Space-ópera, es decir, una aventura fantástica ambientada en un futuro mas o menos lejano con un argumento laminar de buenos y malos en el clásico estilo iniciado por la “Guerra de las Galaxias”. Podemos ver en ella todos los tópicos y amaneramientos del género: el viaje iniciático, el amor quasimposible, la causa noble, la “eterna” guerra entre la luz y la oscuridad (o entre la opresión-libertad), el síndrome de David, la desesperada batalla final y la ayuda inesperada en el último momento … y mucha acción, sobre todo mucha acción e imágenes apabullantes que dejen con la boca abierta.
En resumen: una película fácil y divertida (y a veces lo mas difícil es hacer pelis divertidas y si no que se lo pregunten al cine español), predestinada a arrasar en taquilla y dirigida sobre todo al público más juvenil, pero de la que un adulto medianamente inteligente también puede disfrutar enormemente siempre y cuando esté dispuesto voluntariamente a desconectar buena parte de sus neuronas. Nada que alegar: uno ya sabe a lo que viene. Desconectas la parte de tu cerebro que contenga la mas mínima expresión de analítica, escepticismo, crítica o cinismo, te dejas engullir por el espectáculo y… a disfrutar!. Confieso haberlo pasado en grande con pelis mucho peores.
Pero resulta que según JC, su premiado director, la película hay que tomársela en serio. Por lo visto se trata de un alegato conservacionista que denuncia las agresiones que sufren la naturaleza y los pueblos minoritarios por parte de un sistema imperialista y corrupto. Una película para motivar y hacer pensar (sic.). Joer. ¿ Pero lo dice en serio?. Porque si nos ponemos las gafas de pensar…
Si nos ponemos las gafas de pensar podríamos darnos cuentas de la descarada manipulación psicológica a la que es sometido el espectador: Los N’vaii son una sublimación obvia de la ya idealizada figura del Indio Bueno de las Praderas norteamericanas (que nunca existió). Con un aspecto físico diseñado psicológica e infográficamente para resultar atractivo incluso sexualmente y con la que al espectador le resulte fácil identificarse. Si tuvieran cuatro ojos, seis miembros, dientes de quince centímetros y el cuerpo recubierto de placas dérmicas como parece ser la tónica de la imaginativa megafauna de Pandora tal vez no sería tan fácil identificarse con ellos pero la historia de amor interespecífico hubiera resultado mucho mas... provocativa.
Por el contrario los mineros y militares mercenarios están parodiados hasta el extremo. Lo único que mueve el “tinglado” humano es la codicia y hasta los científicos aparecen como meros cómplices forzados hasta que se rebelan (los únicos con el protagonista que se salvan de la debacle moral, aunque si la cosa fuera más realista… no sé, no sé) .Porque a los empresarios sólo les interesa conseguir beneficios (sin arriesgarse mucho, eso sí) y los ingenieros resultan ser siervos obedientes y estúpidos. Los mineros y sus familias son simples bajas colaterales sin rostro que sólo salen brevemente desfilando como borregos al final de la película. Y los militares o son psicópatas de gatillo fácil o son meros esbirros (además de exmarines yanquis). En cualquier caso bastante incompetentes militarmente porque (si nos ponemos serios, eh!) la batalla final entre los helicópteros blindados y los jinetes de dragones resulta muy poco creíble.
Así las cosas resulta fácil tomar partido por los buenos, que son buenísimos y además guapos y defienden una causa nobilísima. En resumen : si consideramos la película desde un punto de vista lúdico es una peli de aventuras sumamente entretenida y de todo punto recomendable. Pero si pretenden que nos la tomemos en serio… bueno, entonces es un panfleto. Un panfleto espectacular plagado de lugares comunes, hipocresía y mala leche. Prefiero tomármela de la primera forma y pensar que JC se ha pasado tres pueblos con la promoción de la peli, queriendo que nadie se escape de pagar la entrada, ni siquiera la progresía mas enconada ni los ecologistas mas radicales ni los antisistema mas refractarios.
Y supongo que habrá una segunda parte. El tema puede ser un filón grandioso porque Pandora podría ser un planeta apenas descubierto al espectador y porque el tema podría dar mucho juego. Propongo tres posibles continuaciones:
PANDORA, DOCE AÑOS MAS TARDE.
1) Llega la Flota de los Marines Espaciales , Legión “Los Devoradores de Mundos” y arrasan el planeta de Polo a Polo. De los N’vaii no queda ni el recuerdo. Pero Pandora se venga porque los científicos llevan a la Tierra semillas del árbol de la Vida que se escapan del laboratorio. Gigantescos árboles de crecimiento supersónico arrasan las ciudades y emiten millones de semillas que convierten a quien las toca en fanáticos asesinos ecoterroristas.
2) Como dice la doctora esa se reconoce que la verdadera riqueza de Pandora reside en su biología, por lo que el Planeta es declarado “Reserva biológica” y su acceso es restrigido a los científicos. Luego a amantes de la natura ricos y luego a amantes de la natura menos ricos… Finalmente los nativos acaban vendiendo abalorios y danzas típicas a los turistas y regentando casinos, disponen de televisión por cable y pelis en 3D y todo el mundo es feliz.
3) Meter más alenígenas en el negocio siempre es garantía de taquillazo. La noticia de las riquezas de Pandora se ha extendido por la galaxia. Además de los humanos, aparecen los aliens, los predators y los mediopulpos de “Independence day” a disputarse el botín. Los N’vaii dudan entre que los frían en aceite o en mantequilla y JC podría fichar a GL para grabar macroescenas de macrobatallas estelares sobre la atmósfera tóxica de Pandora.
P.D. Si yo fuera el malo de la película no hubiera disparado ni un tiro. Le sacudo un peñascazo al árbol desde la órbita y lo convierto en un cráter que ni excavadoras les iban a a hacer falta a los mineros. De paso aprovecho para montar una misión de “ayuda humanitaria” para camelarme a los N’vaii supervivientes.Y nadie podría echar la culpa a los humanos, aunque para guardar el secreto un par de pilotos y seis u ocho controladores de radar tuvieran que sufrir un accidente. Pero claro, esto es “Avatar” y no “El Padrino”.